Tobías siempre se había tenido por un ser desgraciado. Más concretamente, por el hombre más desgraciado del mundo. Sin embargo, lo que nunca podía haber sospechado es que su mala suerte llegara tan lejos y de forma tan repentina.
Había calculado que ella le diría que no, que no se casaría con él. Casi que lo daba por hecho. Pero Alicia, contra pronóstico, respondió que si. Por primera vez en su vida no podía creer en su suerte. Así que tuvo que preguntarle el porqué. Y, entonces, ella se lo dijo: "tengo cáncer, me quedan apenas tres meses, y no quiero pasar un día más sola en este mundo".
El pobre Tobías la quiso lo mejor que supo hasta el final y, mientras su mano perdía el último hálito de fuerza, pensó que en el fondo no era tan desgraciado como había pensado.
Había calculado que ella le diría que no, que no se casaría con él. Casi que lo daba por hecho. Pero Alicia, contra pronóstico, respondió que si. Por primera vez en su vida no podía creer en su suerte. Así que tuvo que preguntarle el porqué. Y, entonces, ella se lo dijo: "tengo cáncer, me quedan apenas tres meses, y no quiero pasar un día más sola en este mundo".
El pobre Tobías la quiso lo mejor que supo hasta el final y, mientras su mano perdía el último hálito de fuerza, pensó que en el fondo no era tan desgraciado como había pensado.
Comentarios
Pero sin duda lo k más ha captado mi atención ha sido la etiketa "amores raritos" XD.Un saludo.
Se nota que me obsesionan los motores de búsqueda, ¿verdad?