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Un hueco en el corazón

Pedro no pasó buena noche. Se levantó con la sensación de haber perdido el norte de sus sueños en algún momento de la madrugada, aunque no recordaba que se hubiera despertado.
Durante su media hora de jogging se sintió más cansado de lo normal, aunque lo achacó a la mala noche. No fue hasta medio día, cuando el cigarrillo del aperitivo le dejó sin respiración, que comenzó a preocuparse.

Se cansaba al caminar, le faltaba el aire en medio de las frases, y comenzó a notarse el perímetro de los labios ligeramente morado. Durante la última reunión del día, ya no pudo mantener siquiera una conversación y, en medio de un ataque de ansiedad, perdió el conocimiento.

Lo recuperó al poco tiempo, y su primer pensamiento fue para María, con quien acababa de romper. Mientras, en la sala de radiografías, un nutrido grupo de especialistas se peguntaban cómo era posible que alguien pudiera sobrevivir con tan enorme hueco en el corazón.

Dedicado a Llanos, todo corazón.

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
Precioso.
En momentos como el que estoy pasando, esto es, sencillamente con lo que uno se siente identificado.
¡Enhorabuena!
;-)
Anónimo ha dicho que…
Yo creo que cualquier cosa que diga va a quedar de pena al lado de semejante historia!!!
Es muy bonito, muchas gracias, nunca había sido la protagonista de ningún cuento si acaso de una tira cómica pero es todo un honor ocupar un hueco en tu blog, que tu corazón está ya overbooking!!!
Un besazo
Llanos

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